Mi nombre es Karen Paulina Arrieta Moore, soy originaria del estado de Durango y soy víctima de violencia y secuestro de mi hija, tengo una bebé de un año seis meses de edad y todo su primer año de vida vivió conmigo en ese estado.
Bajo engaños, en acuerdo y coludido con toda su familia, el papá de mi hija, Mauricio “N”, me estuvo convenciendo dos meses de traer a mi bebé al estado de Veracruz argumentando que sus papás estaban muy tristes por el secuestro que vivieron su sobrino y su mamá el año pasado.
Accedí a traer a mi bebé a Veracruz a que conviviera una semana con su padre y sus abuelos, tras lo cual me llevé una gran sorpresa al ver que tenían todo armado para robarme a mi bebé, donde empezó esta pesadilla.
A la semana me corrió de su casa de manera violenta y diciendo que yo me iba, pero mi bebé se quedaba y “sobre su cadaver” me llevaría a mi hija conmigo.
En ese momento gané unos días más al no quererme salir de esa casa hasta asegurarme que la bebé se viniera conmigo pero no fue posible; sacaron mis cosas de la casa y pusieron mis maletas en la calle.
Fui a denunciar a la Fiscalía Especializada de lo Familiar. Llevo seis meses en esta lucha.
El señor interpuso un depósito de menor en el juzado Décimo Cuarto de lo Familiar con el juez Víctor Fernández Luna, quien lo acreditó de manera ilegal debido a que yo contaba con la custodia por derecho, a partir de ese momento comencé una lucha legal sabiendo que la ley promueve que un bebé no puede ser separado de su madre a menos que sea un caso excepcional.
Este señor también interpuso un amparo con el C. Juez Cuarto de Distrito en el Estado de Veracruz con residencia en Boca del Río, el cual está por resolverse esta misma semana pero esto podría atrasar hasta por cinco meses el proceso de restitución de mi hija.